"Mis experiencias de estos 50 años confirman a menudo "¡ES EL SEÑOR!" Aunque soy pecadora, Dios, que me ama sin cesar, me ha llamado, transformado y enviado a iluminar el mundo del trabajo con nuestro carisma SSJ, siguiendo las huellas de Jesús Obrero de Nazaret, defendiendo la dignidad de la persona humana, especialmente de las mujeres trabajadoras y de las jóvenes en situación de riesgo, y promoviendo el valor dignificador del trabajo. Iyan ang pinanghahawakan ko hanggang ngayon. (Ahí es donde se ha fundado mi vida hasta ahora)" ( MILAGROS MARAVILLA, SSJ) SEGUIRLEYENDO